Estimados compañeros,
Somos unos padres, los dos Policías de la Escala Básica y que en la actualidad estamos destinados en Valencia.
Os dirigimos este escrito porque se que podemos contar con vosotros, con vuestra solidaridad y vuestra ayuda porque ahora es ya lo único que nos queda.
Tenemos un hijo de 7 años, Pablo, que hasta hace un año y medio, cuando tenía algo mas de cinco años, era un niño sano y feliz. En el verano del 2013 cuando estaba de vacaciones en León, de donde soy natural, de repente, sin motivo aparente nuestro hijo se quedo inmóvil del cuello hacia abajo sin que hasta el momento presente tengamos ningún diagnostico de cual es la enfermedad que le ha afectado tan gravemente.
Primero fue atendido en León, donde después de realizar ímprobos esfuerzos debieron reconocer que no sabían cual era la afección que le había postrado de manera tan cruel. De allí nos remitieron a La Paz en Madrid donde permaneció varios meses sin que se produjese ningún avance o diagnostico. Posteriormente regrese a Valencia donde estoy destinada en la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras donde todavía a día de hoy y pese a los esfuerzos de los doctores de La Fe, seguimos sin tener un diagnostico para la tetraparexia que padece y que le ha dañado incluso el habla, puesto que lo fuera lo que fuese, maltrató su cuerpecito, afectándole al cerebro y dejándole estas gravísimas secuelas.
Va recuperándose muy poco a poco, con muchísima rehabilitación y muchísimo esfuerzo. Hace un montón de terapias que le ayudan a estar mejor, cámara hiperbárica, Lokomat, Therasuit, toxina botulínica…
Hasta ahora hemos ido tirando con los ahorros que teníamos y de la compañía DKV que se está portando fenomenal, pero la mayoría de las terapias son carísimas y la compañía no nos lo cubre todo y el dinero inexorablemente se acaba.
Por eso recurro a vosotros compañeros, porque no puedo dejar y no quiero dejar de darle todo lo que pueda para que siga mejorando. Los que tengáis un corazón en el pecho y sobre todo aquellos que tenéis hijos, sin duda entenderéis nuestra desesperación de ver a un niño que apenas hace año y medio corría feliz y hoy se encuentra postrado en una cama sin poder siquiera hablar.
Con un poquito de todo aquel que pueda colaborar (según están las cosas…) podremos hacer que Pablo siga recuperándose.
Este es el número de cuenta, está a mi nombre Beatriz González Escapa y al de Pablo Nadal González:
ES21 2100–4493–72–0100342997 de CAIXABANK,S.A. y en concepto debe constar: DONATIVO.
Os doy mil gracias a todos por leer este correo con el ruego de que le deis la mayor difusión posible y agradezco a todo el que pueda poner su granito de arena, porque de poquitos se consiguen grandes cosas.
Gracias, un fuerte abrazo a todos y que Dios os bendiga por vuestra generosidad.
Si alguien está interesado en ponerse directamente en contacto con Beatriz su teléfono es: 667 500 962, y su correo electrónico el bgeleon@hotmail.com